top of page

Sonrisas marcadas por la historia del país

 

Desde los años 60 en Colombia se incrementó el cultivo de marihuana abriendo una época sin fin de lucha y consternación para los colombianos, en especial para aquellos que se han visto afectados por el narcotráfico como terceras personas, perdiendo sus familias y su tranquilidad con los atentados que han dejado una huella intachable en sus vidas.  Como el caso entre muchos otros de Gonzalo Rojas, director de la Fundación Colombia con Memoria quien a los 10 años perdió a su padre en uno de estos ataques generado por uno de los capos más fuertes de la historia colombiana, Pablo Escobar, o “El patrón” como es conocido, gracias a que los medios de comunicación han mostrado otras versiones de él. Ahora mostraremos otra parte, un dolor que une a muchas personas en este país de constante conflicto y controversia entre el estado y quien no confía en él.

 

 

 

A inicios de la década de los 70, se encontraron aquellas personas que comenzaron a obtener beneficios de la droga, viendo esta como un negocio, consiguiendo dinero, pero a su vez afectando familias y tierras, estas personas se denominaron narcotraficantes, quienes desde entonces han desencadenado toda una mafia en la cual la producción y distribución de drogas hacia los otros países se  ha venido incrementando considerablemente.

 

En este trayecto, el gobierno colombiano ha tratado de combatir la problemática del narcotráfico, el proceso ha sido eterno y no se ha cumplido con este objetivo, contrario a esto, los narcos han logrado acabar con sonrisas y vidas de personas inocentes que en algún momento han considerado que a pesar de las adversidades  Colombia podrá ser un país mejor.

Columna de opinión

¿Y lo tienes que soportar?

 

Cuando se acerca el lanzamiento de una nueva novela, la propaganda que le hacen es increíble, de por sí, todas las personas empiezan a hablar de esto y  las redes sociales colapsan de tantas menciones.

Todos hemos estado a la expectativa de lo que los canales y sobretodo los nacionales van a promocionar, no sólo por mirar la trama de la novela, sino por el hecho simple y sencillo de criticar y ratificar si el canal que se está mirando es el mejor o no. 

En esta ocasión, me voy a referir específicamente a las novelas que generan todo tipo de sentimientos, que dan risa cuando muere el inocente, que nos indignan cuando evidencian sucesos que han marcado la historia del país, pero que cuando el malo de la historia hace algo  que se considera bueno, lo veneran y lo exaltan.

Las narco novelas colombianas, en mi opinión, las peores producciones que han sacado los canales nacionales, y no me refiero a la producción, porque para esas si hay arto presupuesto,  pero que como todo lo que refleja la situación del país o el amarillismo, se vende como pan caliente.

¿Las más exitosas y con el mejor rating?, lastimosamente sí. Y es triste que en un país que ha vivido en carne propia lo que significa la lucha contra el conflicto y el narcotráfico, que ha visto morir a millones de inocentes, en donde las noticias lo que más muestran son los secuestros y atentados,  se presente en horario prime producciones como esas y  la gente haga como si nada.

No digo que todos, pero la minoría decidimos cambiar de canal cuando salen estos personajes a apoderarse de un horario que se supone es familiar.

He escuchado a varios niños decir que quieren ser como Escobar o como el Capo, pero nadie se imagina lo que esto significa. Están viendo que el villano  tiene su lado bueno, entonces, ¿qué podemos esperar más adelante?,  que cuando crezcan  digan que matar no es malo, o que excusen como algo bueno algún acto  terrible  que hayan hecho.

No solamente quiero referirme a los niños que crecen viendo este tipo de cosas y de una u otra forma lo aprenden y lo exteriorizan, sino en las familias de las personas a las cuales estos “héroes” les han causado  daño, el irreparable, el que nunca por más de que pasen los años se puede olvidar.

Es mentira que uno pasa la página, si esto no sucede con cosas que van y vienen, pues mucho menos cuando a uno le han arrebatado a un ser amado de una  forma tan burda y cruel.

Sí, los escritores y libretistas dedican mucho tiempo creando y corrigiendo una y otra vez estas historias, pero  al parecer ninguno ha perdido a un familiar de esa forma, espero que nunca les suceda, pero si la historia fuera al contrario, ¿será que les va a gustar ver como cuentan una y otra vez su tragedia, mostrando al malo también como el hombre maravilloso que se arrepiente y que nadie le critica nada más?. Yo particularmente critico eso, y me pongo en el lugar de aquellas madres, esposas, padres, hijos, y hermanos que han perdido a un ser querido en situaciones tan terribles.

Nadie se enorgullece al decir que en la época de Escobar murieron muchas personas, o que a diario matan a tantos niños, ¿verdad?, entonces por qué no transformar ese estereotipo de novela que llama la atención midiendo la cantidad de muertos que muestra.

Todo lo que se ve en los diferentes paises al fin y al cabo va a terminar siendo transmitido en el mundo gracias a esa alianza que existe entre canales y así va a seguir pasando, porque nadie en absoluto  me garantiza que una vez se lea esto, se  van a dejar de producir narco novelas  porque  acarrea consigo la pérdida de una cifra considerable de dinero .

La culpa no solo está en los que hacen estos productos para televisión, sino también en el público que a medida que va pasando el tiempo se vuelve mas indolente e insensible. 

21 años - Unknown Artist
00:00 / 00:00
22 años - Unknown Artist
00:00 / 00:00
19 años - Unknown Artist
00:00 / 00:00
21 años - Unknown Artist
00:00 / 00:00
bottom of page